Un espacio vacío resulta bastante mas interesante que aquel que hemos "rellenado". Detrás de un buen interiorismo hay elementos que transmiten, que funcionan y que interaccionan en todo momento con nosotros, por eso la elección de cuadros o esculturas debe hacerse con el mismo criterio. No se trata de convertir nuestras paredes en un álbum de estampitas en muchos casos casi pegadas al techo, sino de tener la capacidad de establecer un diálogo con aquello que no tiene otra función mas que la de crear sentimientos y emociones.
Las obras que seleccionamos para nuestros interiores reflejan nuestra personalidad y en buena parte nuestra cultura. El arte es como el buen vino, necesita su tiempo y probablemente según nos adentremos en el mundo del coleccionista nuestros gustos evolucionaran.
Cuando iniciamos nuestra incursión en el mundo del arte es conviene contar con el apoyo de un buen asesor profesional para que no suframos equivocaciones en la selección de obras. Debemos tener en cuenta que tanto asesores como galeristas pueden adaptarse en buena medida a nuestro bolsillo y rentabilizarlo al máximo de este modo nos podremos dar cuenta de que el arte mas que en un gasto se convierten en una inversión debido a que ellos están en contacto con pintores noveles y pueden intuir su futura trayectoria.
En muchas ocasionas obras que inicialmente aborrecemos con el paso de los días nos van enamorando y es fácil que una vez superada la prueba nos cueste desprendernos de ellas.
Debemos tener muy en cuenta que cada obra de arte es fundamental que respire y tenga el espacio y perspectiva necesarios. Si adquirimos cuadros sin enmarcar será el experto el que nos aconseje en su elección ya que el marco debe ser fiel y discreto compañero del cuadro.
La iluminación resulta vital para la obra. Evitaremos los brillos y deslumbramientos de forma que tengamos la sensación de una iluminación natural de la pieza. Existen bañadores de pared especialmente indicados para cuadros y luminarias para esculturas.
Al iniciarnos en el coleccionismo de arte contemporaneo nos puede asustar que el ambiente de nuestras casas tenga dificil convivencia con opciones artísticas mas atrevidas, pero no es así, los interiores demasiado clásicos o rústicos y densos reviven con el arte contemporaneo pudiéndose crear una interesante fusión.